Residuos extracomunitarios
El alcalde de Nerva solicita a las Administraciones regional y central información fidedigna sobre la llegada de nuevos residuos transfronterizos y pide su paralización en caso de ser cierto
El alcalde de Nerva, José Antonio Ayala, ha solicitado información sobre la llegada de nuevos residuos peligrosos procedentes de países extracomunitarios tanto al Ministerio para la Transición Ecológica como a la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de Huelva, tal y como anuncian varios medios de comunicación, y la paralización de los mismos en caso de confirmarse.
Según informan desde el propio Ayuntamiento de Nerva a través de esta nota de prensa, "como ya hiciera público con la anterior llegada de residuos procedentes de Montenegro el pasado Noviembre de 2020, el Ayuntamiento de Nerva muestra su total rechazo ante la situación y la manera en que se está tratando al municipio. Asunto que ya se ha puesto de manifiesto en reiteradas ocasiones, tanto a la Delegación Territorial que “es quien ostenta la competencia en materia de residuos industriales y controla el depósito de los mismos en las instalaciones de Nerva” como al Ministerio que “es quien ostenta la competencia a nivel estatal en materia de residuos industriales”.
"Nerva, no solo ha tenido que soportar cómo no se ha cumplido la mayoría de los acuerdos y las promesas en torno a esas instalaciones, sino que a raíz de que mostrara su desacuerdo con la modificación de la Autorización Ambiental Unificada (AAU) planteada por DSM ha dejado de hacer frente a su responsabilidad social y obligaciones con el municipio como represalia", aseguran.
Y añaden, "no solo tenemos que soportar la llegada de residuos del triángulo de Huelva, Sevilla y Cádiz como se acordó cuando esa instalación se implantó en la localidad sino que tenemos que sufrir la llegada de residuos de toda España, la Unión Europea y ya incluso fuera de sus fronteras".
Para los miembros del equipo de gobierno encabezado por Ayala, “los gestores actuales de la instalación mantienen una actitud absolutamente enrocada que no ayuda en nada a solventar el problema, que pasa por poner fecha de finalización de la llegada de residuos peligrosos a una instalación que está a 700 metros del casco urbano”.
Por último, Ayala vuelva a realizar un llamamiento a las Administraciones para buscar una solución “más pronto que tarde a este problema” y exige que “se deje de maltratar al pueblo de Nerva, un pueblo que ha cumplido con creces su solidaridad con la industria y reclama que se le tenga en cuenta para algo más que para traer residuos de todo el mundo”.
